capitulo 4

Podía no haber ido al colegio, para llegar más temprano al negocio del amigo de Don Cosme., pero no había faltado nunca.A veces con el cuerpo y el alma dolorida por los golpes, con hambre, con frío, algo dentro de él le gritaba que esa sería su única salida. Tenía que estudiar, lo necesitaba....
Corrió las cuadras que lo separaban de la estación de trenes, hasta minimercado. Era un negocio agrabable, un poco de música, que apenas se oía como fondo al millar de palabras, bromas y chanzas que el dueño del boliche dispensaba a sus clientes. Era un hombre que rondaría los sesenta años, un poco excedido de peso, sonriente, afable. Cuando vío entrar a Juan sonrió ligeramente y un dejo de desconfianza se asomó en su mirada.
-Si ?? - le dijo
Era la actitud, lo que generaba la desconfianza, no su aspecto físico. El cabello rubio, la piel bronceada por las largas horas en la calle, los ojos azules....mal vestido, desgarbado, desconfiado y alerta. una mezcla de niño y muchachito.
le entregó el papel con la recomendacion de Don Cosme.
-Necesito una changa - dijo en un tono que no dejaba dudas.
- Sos muy pibe - dijo el viejo negando con la cabeza- te tienen que mantener tus viejos, tu laburo es estudiar.
-Yo estudio - dijo- necesito volver a casa con unos mangos porque .... - se detuvo, bajó la mirada y esaperó la sentencia.
Don Hilario tenía el boliche hacía más de 30 años, y se jactaba de ser un gran conocedor de las personas. podía distinguirr a la legua a quien tratara de embromarlo de quien necesitaba ubna mano. Y sabía lo que era un pedido de ayuda.
-No buscaba empleado porque no puedo pagarle bien, si querés, al salir del colegio, te venís le alcanzás las bolsas a la gente, podemos ofrecer el envío ó que hagan pedidos por telefono y llevarselos. Me das una manito acá. Te quedás con las propinas y si puedo te tiro unos mangos más. Donde me cagás perdiste.- Hablaba, mientras veía como se iluminaba el rostro del muchacho-
Y tal vez puedas aprender algunas cosas.
Un viejo amigo siempre dice "Hay gente que ganando, pierde" , pensalo bien, si estas dispuesto nos vemos mañana.
- Porqué mañana , Don?? Hoy falta toda la tarde...
Don Hilario sonrio, y asintió con la cabeza. Sentía que podía haber salvado una vida.

Trabajó toda esa tarde, barrió el piso, acarrió bolsas, tenía el bolsillo lleno de monedas. no era mucho, pero era honesto y su padre tendría que contentarse.Al despedirse Don hilario le pagó un modesto jornal que al Juan le resultó una fortuna.

El siguiente año pasó rápido, del colegio al trabajo, a veces volvía a su casa para ver a su madre, pero nunca con dinero suficiente para librarlo de los gritos y las amenazas. Su padre se cansó de decirle que se podia juntar más dinero si hacía lo que él quería pero no lograba convencerlo.



Es tarde de julio el frío arreciaba especialmente en las casillas de la villa. Sobre el gélido suelo del pasillo de tierra parecían retumbar unos pasos que resultaban especialmente ajenos. Costos zapatos de marca y un traje a medida eran el marco digno de un ser que no pertenecía a ese ambiente. Sin embargo su paso era firme y seguro, sabía como moverse en el ambiente adverso que lo rodeaba, y un gesto rudo y por mementos vulgar se escapaba de sus gestos. Al llegar a la casilla 11 no necesito golpèar, ya que la puerta se abrió y de su interior salió Juan corriendo con sus libros en la mano, casi tropezó copn el visitante , esbozó un "perdón" a la pasada y ser perdio entre los pasilllos de la villa

Lejos de intimidarse por los gritos que salían de su interior, abrió totalmente la puerta. El dueño de casa dejó de bociferar al ver su visita.
- Dotor - dijo
- Era él ? - preguntó el recién llegado señalando la calle - pensé que eras más hábil en esto de domar potrillos.
-terco como mula, no se a quien sale- exclamó corriendo una silla para su visitante.
-Yo sí - murmuró , y permaneció unos segundos perdidos en su mente.- en fin, ayer a la tarde hubo una redada, encontraron a tu hijo afanado, in fraganti, y con los antecedentes que tiene...
Un gesto de impaciencia se hizo presenta en el rostro del anfitrión , miró a su altededor como buscando algo... -Juanjo?? preguntó y solo tuvo un gesto afirmativo como respuesta.
-Está a disposicion del Juez , ¿sabés quien le toco?, es el momento , tiene que confesar como lo ayudaba tu Juan..
- no pudimos obligarlo a nada, ud. lo vió , cuando lo fajo agarra la calle y desaparece - concluyó señalando la puerta con un gesto.
- Cuuantos tiene 15 ó 16?? no lo convenciste hasta ahora, cada vez va a ser más dificil, pero metelo en cana, y las cosas van a cambiar.....
- porque le interesa??
- no es asunto tuyo, pero te dire que quiero cobrarme una antigua deuda.
El Dr Ramón Andrade detuvo su mirada en un rincón de la casilla, como si se tratara de un tunel para ver el pasado, Su rostro se fué endureciendo y una rara vileza se esbozo al disfrutar del plan que habia urdido.
De pronto se puso de pie y se dirigió a la salida , -mas vale que lo visites y le digas que hacer,- dijo- le van a tomar declaración lo antes posible, no querras que vaya en cana solo....
Salió dando un portazo, y se alejó por los pasillos tan agilmente como había llegado.

capitulo 3

El juan, como lo llamaba su madre, miró con desdén a quien se decía su padre.
No tenía más de 13 ó 14 años, pero bien plantado en sus convicciones.
-Te dije que no voy a afanar, le dijo, y recibió un bofetón como respuesta.
-Mirá pendejo, Si te crees mejor que nosotros estas muerto, acá traés guita ó la ligas.le grito con violencia.
Juan giró sobre sus talones y salió dando una mirada a la desvencijada casucha que los albergaba.
Su padre se sentó y se dispuso a degustar un vaso de vino.

Juan caminó por el barrio como si le fuera ajeno. Había crecido en ese lugar, es más, había nacido allí. pero todo le era extraño. Tenía la sensación de que estaba viviendo una historia ajena.
Recordaba cada paliza recibida en su infancia, pero no podía recordar el motivo.
Recordaba escaparse de su casa para ir al colegio, pero no entendía porque. Recordaba haber suplicado para que lo dejen seguir en el secundario, sin que sus padres se inmutaran, tanto que se lo arreglaron en la escuela, èl iba y omitian llamar a sus padres.
Juntaba monedas haciendo pequeñas tareas en la calle, acarreaba cosas, cortaba pasto, abría y cerraba puertas frente a un hotel importante, lo que surgiera, a la vez que estudiaba para el día siguiente.
Juntaba monedas que nunca eran suficientes para librarlo de la paliza. Si su madre osaba defenderlo, también cobraba ella. Estaba harto, estaba creciendo, y ya no estaba dispuesto a seguir permitiendo el abuso.

Caminaba ensimismado en sus pensamientos, cuando vió un cartel en el super del barrio. Precisaban una especie de "che pibe". - Yo puedo, le dijo a Don Cosme el viejo comerciante señalando el cartel.
EL viejo lo miro con desconfianza, lo sabía un buen pibe, pero con esa familia....
- Necesito el trabajo- dijo casi suplicante
El Viejo movió la cabeza hacia los lados
-No,-dijo- acá no, tu viejo te vendría a buscar a cada rato, pero si querés tengo un amigo, tiene un boliche como este, cerca de Constitución. Seguro que puede darte algo. Y le anotó una especie de recomendación en un pedazo de papel de envoltorio.
Esa noche no volvió a casa.
Al otro día, cuando salió del colegio, caminó hasta la estación, tomó el tren y se fué a la direccion que lo enviara Don Cosme.



La vida transcurría sin sobresaltos, sin alegrias, una tristeza antigua se dejaba entrever en cada detalle, en cada sonrisa. Agustin Romano Hernandez, juez, conocido por su rectitud, por su equidad, y Sofia su esposa, sentados en la enorme sala de estar, charlaban animadamente con otra pareja, Ramón Hernandez abogado , fiscal , amigo de Agustín desde que ingresaron en la Facultad, allà lejos y hace tiempo,siempre habían transitado la vida juntos. Tanto que Sofía y Natalia, la esposa de Ramón no habían tenido otra opción que hacerse amigas. Y lo eran, transitaban una amistad de muchos años, no parecian afines para quien las viera por primera vez, pero se respetaban y admiraban mutuamente.
Natalia no había tenido hijos y al desaparecer el de Sofía sus lazos se había estrechado aún más.
- Para donde zarpamos este año de vacaciones? - preguntó Ramón con los ojos brillando con el entusiasmo de un niño.
- NO se,- dijo Agustin tomando de la mano a Sofía- este año nos pegó fuerte. 10 años...-susurró
Un dejo de rencor se dejó entrever en los ojos de su amigo, pero en seguida pudo disimularlo - entiendo -dijo- pero justamente hace mucho tiempo, ya deberían superarlo.
Esta vez el rencor y la sorpresa de mezclaron en los ojos de Agustín.
- Hay cosas que no se superan nunca - dijo Natalia mirando comprensivamente a Sofia, quien asintió.

capitulo 2

Sofia descendio la escalera con gesto adusto.
La mirada sombria dejana entrever un dolor profundo, una tristeza que parecía haberse hecho carne.
En la sala se encontraba su esposo, unas maletas decoraban el centro de la estancia, reinaba un silencio triste.
-No quisiera irme, - dijo mirando a su esposo, como quien repite una letanía.
Agustin la miro compasivamente.
-tenemos que irnos, me tomé un año sabático para esto, tenemos que alejarnos, tratar de rehacernos.......

Un año atrás el secuetro de su hijo nicolás, habia puesto sus vidas al revés.
Pagaron el rescate, siguieron las instrucciones..pero nunca volvieron a ver a su hijo.

- No quiero rehacerme, quiero esperar a nicolas, susurró
- Ël no va a volver- dijo lentamente el hombre, pronunciando cada palabra con energía.
- Jamas, me entendés _repitió Sofía_ voy a creer que esta perdido, sé que está vivo, lo siento..
- Dios lo quiera Sofi, pero los que se lo llevaron no van a devolverlo, tal vez el tiempo y el destino lo traiga otra vez con nosotros, ojalá,. Pero si queremos esperar a que esto suceda tenemos que aprender a vivir otra vez.- Lo dijo con tal energía que nadie se atrevería a retrucarle.

Se sintió el sonar de un timbre y la mucama atravesó la habitación para abrir la puerta
El comisario Merlo los saludo amablemente.
-Me alegro que puedan tomar distancia- dijo- ha sido un año muy dificil y muy largo
-Gracias comisario- respondió el anfitrión.
Agustín era un hombre amable, fundamentalmente, y para todos los que lo trataban, era un hombre decente. Un buen hombre Recto, justo , cordial.
- Y gracias por haber venido- como Ud dijo, necesitamos tomar distancia, pero no quiero hacerlo sin dejarle las direcciones y los números para contactarnos.
Por favor, si surge algo, cualquier indicio, cualquier sospecha , cualquier posibilidad por remota que sea....
-Cualquier posibilidad que exista, uds van a enterarse....- interrumpió el comisario- vayan tranquilos, nosotros seguiremos buscando.....- concluyó con una sonrisa franca y un apretón de manos.

Un matrimonio que se ama recorriendo Europa sin pausa ni prisa, pudieron visitar París, Roma , Recorrer las calles de España, visitar el museo de Louvre, el museo del prado, catedrales y castillos con miles de años de historia, y tomar fotos en la torre eiffel, la torre de pizza, la plaza de toros...
Solo el inmenso amor que los unía los mantuvo vivos ...
Y el tiempo siguió su curso, impiadoso, inexorable, y tuvieron que volver a su vida a sus fantasmas..........

escrito en la sangre. Capitulo 1

Capitulo 1

Oficina de juzgado. lugar sobrio, un enorme escritorio de madera obscura, un buen sillón, telefono, monitor de computadora y teclado a la vista.

Detrás un gran librero.
Rige un orden absoluto.

Se abre la puerta y entra el Dr. Agustín Romano Hernandez (Dr. ARH), trae unos papeles en la mano que apoya en su escritorio. Se lo ve cansado, pero su expresión transmite serenidad. Detrás de él otro hombre de buen porte, parece “fingir” ser amigo. Detrás de ellos la secretaria, una mujer joven aún , elegante, bordeando los 50 años.

• Que Día , Doctor! -exclama- Les acerco un café y un aperitivo, verdad?. Se retira sin esperar la respuesta, luego de dejar una pila de cartas sobre el escritorio.

Ellos asienten con la cabeza.

El Dr ARH pasa su mano por la cara en un gesto cansino.

• Este asunto de criaturas delincuentes me saca.

• El defensor puso mucho empeño en demostrar que en ese medio es mas sencillo delinquir, y mas difícil abstenerse.

• No Ramón, esto no es cuestión de ambiente sino de cuna, lo traen en la sangre. Si relees su expediente vas a ver que todos tuvieron alguna oportunidad de salir de esto, solo que no la tomaron...

• Insisto en que no debe ser tan fácil...

Se abre nuevamente la puerta y entra la secretaria , trae una charola con dos tazas de café y un plato con varios sandwiches de miga.

• Cuando la vas a cambiar por otra más joven (Ramón) y más bonita – susurra cuando se cierra la puerta.

• Cuando empezó a trabajar conmigo tenía 19 años, era preciosa..ahora es interesante pero nos conocemos de memoria, es el archivo de mi vida...no la cambiaría por nada.

• (risas) volviendo al caso... tenes un hijo, ..de buena cuna... crees que zafaría de esto?

• Afortunadamente nunca va a tener ocasión de decidir. A estos chicos les tiraron miles de sogas. No estan acostumbrados a trabajar, sus padres, sus abuelos, todos son iguales, están convencidos de que el mundo les debe algo, y decididos a tomarlo. Alguien les enseñó que tienen derechos, se olvidó de decirles que también obligaciones...No tiene remedio..

Se escucho un sonido, el aviso de un mensaje recibido en la computadora.

ARH mira distraídamente, y pulsa el teclado , la pantalla se abre y al verla su rostro denota inquietud.

En el monitor puede leerse la frase..”si los condena no va a alcanzarle la vida para arrepentirse..”

• No te digo – exclama a la vez que gira el monitor para mostrarlo al otro hombre -esto no tiene arreglo.

• Que vas a hacer entonces?? en la pregunta se entremezcla la curiosidad con la autosuficiencia.

• Cumplir con mi trabajo, como siempre, no les tengo miedo.

Ramón Andrade, ese era el nombre del interlocutor iba a decir algo más, pero prefiere mantenerse en silencio .

Se abre la escena , es una casa grande, elegante, con enormes jardines de esas que hacen pensar en enormes herencias, familias que siempre tuvieron mucho dinero y solo pudieron ir acrecentándolo.

En el salón, sobrio en el estilo de decoración hay una larga mesa con mantel de vivos colores, muchos platos con comida rápida y canapés, y varias tortas . En la Cabecera una torta enorme con un Feliz cumpleaños y 5 velitas.

Globos en los rincones y sujetos de la escalera.

Muchos niños riendo y corriendo por todas partes detrás de una joven disfrazada de Minnie.

Los adultos charlan animadamente en un sector con sillones de living.

Entra en la sala el juez de la escena anterior, se lo ve distendido, un niño le salta a los brazos y el lo abraza . Se acerca a una mujer joven , elegante, se la ve feliz, ella se le acerca y lo besa.

Minnie anuncia el momento de soplar las velitas y todos se acercan a la mesa.

Con la música de un feliz cumpleaños, se va disipando la escena.

Nuevamente la oficina del juzgado, el Dr ARH lee atentamente el contenido de una carpeta, un par de golpes de la puerta que se abre y deja paso a la secretaria

• Dr, el Dr Ramón Andrade quiere verlo.

El la mira inquisidoramente

• Es importante-agrega

• Porque tanto preámbulo?, que pase!

El hombre que entró en el despacho, parecía arrastrar sus pies, daba la sensacion de no querer hacerlo, de ser portador de un terrible mensaje.

Se acercó al escritorio ,se sento, y trató de buscar en su cerebro las palabras apropiadas...Miró suplicante a la secretaria pidiendo ayuda con los ojos.

Ella se hizo cargo de la situación

• Llamó Sofia, su esposa, me pidió que la comunique con el Dr. Andrade....

• Te necesita urgente en tu casa dijo él, Nicolás no volvió del jardín, en el colegio dicen que lo retiró un custodio tuyo, con una orden firmada por vos, hace más de 2 hs. , Dicen que llamaste personalmente para avisarles que irian por él, que había problemas, pero no diste detalles.

• El Dr ARH se puso de pie violentamente, tomó el teléfono para hacer una llamada, pero dos timbres le parecieron una eternidad , tomo el saco del perchero y salió corriendo.

Los demás quedaron en silencio, la atmósfera se hizo aún más pesada. Y la escena se desvaneció.

La misma sala del cumpleaños, pero ahora con una sobriedad absoluta, Sofia, Su esposo Agustín , varios policías,... Se respiraba un ambiente tenso, angustiado.

Sofía otrora alegre , sentada en un sillón, con los ojos rojos de tanto llorar, parecía respirar con dificultad. Agustín igualmente tenso, mantenía una calma aparente y daba indicaciones y ordenes.

Entra en la escena el Comisario Merlo

• Esta es la nota que llegó al Colegio, realmente parece su firma.

• Vamos a necesitar un calígrafo comisario,

• Ya estoy en eso,.dicen que fue alguien que se identificó como su custodio, , que iba en un vehículo oficial.........

• Lo vamos a encontrar-agregó mirando a Sofía.

El hombre de aspecto rudo y vulgar, se acercó caminando lentamente por el pasillo que hacía las veces de calle interna de la villa.
La mugre que servía de decorado hacia todos lados, y el calor intenso de la tarde de verano impregnaba el ambiente de un hedor fétido.
LLegó hasta la casilla numero 11 caminando lentamente. Conocía el barrio, se movia comodamente, como pez en el agua. Golpeó enérgicamente la puerta, que se abrió por el mismo peso de sus golpes.
Dentro, un cuarto pequeño servía de comedor, cocina y dormitorio. Varios colchones en el piso mostraban la existencia de varios moradores. Y tras una cortina otro colchón en el piso, hacía las veces de recámara principal.
Sentado junto a la mesa, cerveza en mano, otro hombre de aspecto desagradable lo saludó con un gesto de cabeza.
- Te Trajo el calor? -pregunto sin moverse
- un negocio -respondió negando con la cabeza...
Le señaló una silla apoyada contra una pared, que el recién llegado acercó a la mesa, a la vez que manoteaba un vaso de la mugrosa mesada.
-Vale para una birra? preguntó a la vez que acercaba la botella al visitante.
-Vale para la Quilmes entera, señaló con misterio.
-te escucho- dijo el dueño de casa levantando su vaso como un brindis.
- El asunto es simple. ese juez que se cree muy recto, mandó a mi pibe en cana, le advertí que no lo hiciera pero nada...ahora yo tengo a su pibe .
- Estás en pedo! grito- el hijo de un juez,! te pagaran el rescate, pero te van a perseguir hasta el fin del mundo...
- pensé en pedir unos pesos, para despuntar el vicio, pero no voy a devolverselo......por eso te necesito.
- yo tengo suficientes quilombos sin tu ayuda..gracias, paso...
-cobro el rescate, yo me arriesgo, y repartimos la guita mita y mita. Y escondes el pibe, tenes como 10 , uno más no llama la atención.

La información no llegaba raídamente a su cerebro, pero sus gestos confirmaban que estaba sopesando los datos....lentamente

.-Esta bien- dijo lentamente

El otro sonrió complacido e inmediatamente se puso en marcha.

No habría pasado mas de una hora cuando volvió a entrar, encontró a su anfitrión en la misma posición que lo había dejado. Traía en sus brazos un chiquillo llloroso y asustado, de unos 4 años.

Miró detenidamente al pequeño, puso su obscura mano sobre el rostro rosado del pequeño, miró su cabello rubio y sus enormes ojos azules....

-habrá que teñirle el pelo, y enroñarlo bastante,..... como le dicen?? una mosca en la leche, si, - reflexionó malhumorado-uno mas no llama la atención...

- Juan! sentate ahí y quedate quieto- dijo mirando al niño
Una mirada desafiante se dejó entrever en sus ojos azules
-No me llamo Juan, soy nico - dijo.
- Juan, Te tengo dicho que no me contestes así, soy tu padre y vas a respetarme- gritó mientras se quitaba el cinturon y se disponia a darle la primera de muchas palizas.